Durante el mes de marzo, los estudiantes de cuarto y quinto grado participaron en una convivencia; jornada organizada por el grupo EIWAANE que inició en el parque Guaymaral.
Durante el día, los niños disfrutaron de diversas estaciones y actividades como «Recorrido de animales», «El robot obediente» y «Luna Bandeja», que les permitieron desarrollar habilidades sociales y emocionales en un entorno natural. La convivencia estuvo llena de entusiasmo, trabajo en equipo y aprendizajes significativos para ambos grados.
Los estudiantes de cuarto grado enfocaron su convivencia en desarrollar la capacidad de escuchar y seguir instrucciones, a través de juegos de simulación. A lo largo de las actividades, trabajaron en el auto respeto, el buen trato y la gestión de emociones, fortaleciendo la cooperación entre compañeros. Juegos como «Túnel cooperativo – voley telas» y «Oruga», ayudaron a los estudiantes a practicar la paciencia, la comunicación y la importancia de acatar indicaciones para lograr objetivos comunes.
Por su parte, los estudiantes de quinto grado tuvieron como propósito principal fomentar la autonomía y la convivencia respetuosa, mediante dinámicas que promovieron la resolución de conflictos y el cumplimiento de normas. Actividades como «Cuadrilátero a ciegas» y «¿Quién le teme al monstruo de Nueva York?», impulsaron la toma de decisiones responsables y el cuidado de objetos personales y colectivos. La convivencia finalizó con una reflexión grupal en la que se destacó la importancia del respeto y la comunicación asertiva entre pares.
Terminada esta jornada, los directores de curso recibieron la retroalimentación de cada curso, con las fortalezas de la actividad y con aquellas sugerencias que al interior de cada curso, puedan mejorar las relaciones interpersonales y la sana convivencia.