Los estudiantes de grado octavo participaron en una experiencia educativa única e interdisciplinar, al resolver un caso criminal empleando el método científico en prácticas de laboratorio, en la clase de química, así como sus habilidades argumentativas y de persuasión en la segunda lengua.
A través de esta experiencia, nuestros estudiantes no solo aplicaron los conocimientos teóricos, sino que desarrollaron habilidades experimentales y lingüísticas, proporcionándoles una experiencia enfocada en la resolución de problemas de manera práctica y colaborativa, preparándolos para enfrentar desafíos en el mundo real.